Legado

UNA HISTORIA DE FE Y PASIÓN POR JESUCRISTO

“Volviéndose hacia los discípulos, les dijo aparte: “Dichosos los ojos que ven lo que ustedes ven; porque les digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que ustedes ven, y no lo vieron, y oír lo que ustedes oyen, y no lo oyeron.” (Lucas 10:23, 24)

 

Fue un día memorable en la historia de México un 14 de marzo de 1949 cuando un hombre pisó tierras mexicanas con el deseo y propósito de contribuir al extendimiento del Reino de Dios. Ese hombre, Daniel Karl Ost en compañía de su amada esposa Ruby Ost vinieron como, “Embajadores de Cristo entre el Pueblo Mexicano”. Tanto amaron a su México que ambos fueron sepultados en la Ciudad de México, en abril de 1985 y febrero de 1987 respectivamente.

 

Llegaron para quedarse e invertir el resto de su vida en fundar sobre bases bíblicas, lo que, en un principio se constituyó como una asociación de iglesias denominadas “El Calvario de de la Cruzada Misionera de Avivamiento”. El trabajo empezó en pueblos chicos, rancherías y ciudades en el norte de la República Mexicana, tales como: Los Herrera, Nuevo León; La Corona, Nuevo León; Escobedo, Coahuila; Monterrey, Nuevo León; y en Villa del Carmen, Nuevo León donde establecieron su lugar de residencia en el año de 1960. Posteriormente se extendió el trabajo a El Refugio, San Luis Potosí en 1964. En todos estos lugares se encontraban almas preciosas que aceptaron a Cristo como su Señor y Salvador personal. Simultáneamente se estableció el Instituto Ministerial “El Calvario”, en Villa del Carmen, Nuevo León en el año de 1960, donde han sido preparados la gran mayoría de los siervos y siervas de Dios que colaboran en el Centro de Fe, Esperanza y Amor. Algunos de ellos ahora son los que están al frente, dirigiendo la obra nacionalmente.

 

Al correr de los años Dios abrió mayores puertas al otorgarle al Hermano Daniel (como todos lo conocían) una avioneta. Tuvo la pasión profunda de usarla para distribuir folletos desde el aire y así, con la ayuda de otros pilotos se distribuyeron 20’000,000 de folletos en dos terceras partes de México. Cada folleto llevaba un mensaje de salvación y un cupón de inscripción para un Curso por Correspondencia. Esto motivó a que centenares de millares solicitaran el curso.

 

Dios también abrió otra puerta, la de la radio. El Hermano Daniel comenzó a transmitir el programa “Agua Viva”, el cual tuvo una aceptación en todos los lugares que se podía escuchar. Fue un programa que se transmitió en diferentes ciudades de México y otros países. Los programas de radio tuvieron un gran impacto sobre el país, hasta el grado de atraer tanta gente a Jesucristo que se tuvo que pensar en grandes edificios para albergar a tantas personas que vinieron a los pies de Cristo. Así fue, cómo en el año de 1971, se tomó la decisión de que las iglesias “El Calvario” cambiaran a “Centro de Fe, Esperanza y Amor”. En ese mismo año se establecieron los primeros Centros de Fe, Esperanza y Amor en las ciudades de Monterrey y Monclova.

 

Esto inició una etapa completamente nueva y revolucionaria para la evangelización en México. Se establecieron Centros de Fe, Esperanza y Amor en Guadalajara, en el año de 1974, en la ciudad de Puebla en 1975 y posteriormente en el Distrito Federal en junio de 1976, así como en otras ciudades claves de la República Mexicana, con gran éxito. Líderes espirituales de otros movimientos cristianos evangélicos tomaron nota de lo que Dios estaba haciendo y al observar que era un mover genuino del Espíritu Santo, empezó a haber un despertamiento en muchos de ellos y al captar la visión, también aceptaron el reto de establecer grandes locales para la predicación de la Palabra de Dios. Muchas de esas iglesias están creciendo para la gloria de Dios. Esto es un ejemplo del impacto que una vida puede tener en los demás.

 

Resta decir que Centro de Fe, Esperanza y Amor, sigue “viento en popa”, ya que la herencia espiritual que el Hermano Daniel dejó, ha sido muy fructífera en las riquezas en gloria en Cristo Jesús y a la vez de mucha responsabilidad para los que hemos quedado al frente de esta magna obra. Agradecemos a todos los ministros y consiervos que han formado parte del liderazgo en estos años, por su dedicación y apoyo que han dado. Se han abierto Centros de Fe, Esperanza y Amor en países como Francia, Colombia, Nicaragua, Guinea Ecuatorial, Juntos hemos podido enviar misioneros mexicanos al extranjero en países tales como: Nicaragua, Guinea Ecuatorial, Africa, España, entre otros.

 

La Iglesia de Jesucristo no lo hace un movimiento, una denominación o una religión. La Iglesia por la cual Jesucristo vendrá, está constituida por millones de personas en el mundo que han reconocido su necesidad de Dios, ellos le han creído al Dios de la Biblia, ellos han creído y abrazado a Jesucristo como su único y suficiente Salvador. Es bueno precisar que Centro de Fe, Esperanza y Amor no es la única iglesia de Cristo; pero si forma parte, como una de tantas expresiones, del cuerpo de Cristo (1 Corintios 12:14). Así pues, nuestro deseo y oración es que este testimonio lo anime a usted a ponerse en las manos de Dios para su obra, y dejar que Dios lo use al ver lo extraordinario que Dios puede hacer en aquellos que no le conocen.